EUKENE SAN JOSÉ| A punto de cumplir 2 años desde que empecé en el mundo del running, echo la vista atrás, y me doy cuenta de lo afortunada que soy por toda la gente que he conocido hasta ahora. Gente variada, sin nada más en común que el amor al deporte, ya sea running, bicicleta o nadar, porque yo no sólo le doy al running, ahora también hago triatlón!!!! Increíble, pero cierto...
Hoy en día son diversos los motivos por los que la gente se inicia en el deporte: bajar de peso, estrés, problemas psicológicos o simplemente porque queremos disfrutar practicándolo.
La vida a veces es muy complicada y todos tenemos nuestros problemas, aunque para cada uno nuestro problema es el más importante, e intentamos buscar soluciones o, al menos, intentamos minimizarlo en lo posible.
El deporte para mi es una vía de escape. Empecé a practicarlo por prescripción médica y ha sido lo mejor que he podido hacer. Gracias a él hace tiempo que han disminuido los ataques de ansiedad, suelto mucha agresividad que tengo guardada, y además me aporta seguridad y confianza en mí misma, aunque todavía me quede mucho camino por recorrer.
El deporte ya forma parte de mi vida diaria y familiar, para mi es una mejor forma de vida. Hay días que no se descansa bien, que da pereza...pero aun así sales a entrenar, o a una prueba y, cuando terminas, te sientes genial.
Cada entreno, carrera, travesía, triatlón o nuevo reto es una terapia para mí. Cuando los termino hacen que me encuentre satisfecha con lo que he hecho, incluso cuando no salen como lo tengo planeado.
Jamás hubiera pensado que la práctica del deporte pudiera ser tan beneficiosa a nivel psicológico como ha sido en mi caso. Muchas veces reflexiono sobre cómo habría sido mi vida, si durante los 3 años que pasé bajo tratamiento psicológico hubiera practicado deporte. No puedo tener la certeza, pero creo que mi recuperación se habría acelerado, pero aún así no tengo la sensación de que el deporte haya llegado tarde a mi vida, porque más vale tarde que nunca.
El deporte me ayuda a estar más tranquila, a enfrentarme mucho más fuerte a cualquier altibajo. Me he dado cuenta de que si te agarras a él en su justa medida, los días pueden llegar a ser menos angustiosos y ayuda a no ver las cosas tan negras. El deporte me ha hecho creer en mí y en mis capacidades para superar las adversidades.
No se trata de decir que todo es bonito desde el principio ya que en el camino hay baches y pensamientos negativos saboteándote, pero os puedo asegurar que la satisfacción que sientes y el bienestar que te aporta cuando consigues lo que te propones, suple a todo lo malo que quiera aflorar, porque te das cuenta que puedes vencer todo eso, tienes fuerza y capacidad para hacerlo, aunque en algunos momentos creamos que no. Por ello creo que con mucha fuerza de voluntad y diciéndonos a nosotros mismos/as cada día que se puede "salir del agujero" podemos lograr disfrutar de la vida a pesar de los problemas.
Así que a todo aquél que se pregunte si el deporte me ha ayudado a superar un problema psicológico y que éste afecte lo más mínimo a mi vida diaria, les digo Sííí.... Gracias a él mi vida ha cambiado, y en positivo.
¡El deporte engancha... pruébalo y me lo cuentas, no tienes nada que perder!💪😜
Foto apertura: Festak.com.
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